La historia del mundo está plagada de las batallas más cruentas. Basta recordar los episodios históricos de la Primera y Segunda Guerra Mundial, la Guerra Fría o la Guerra de Vietnam, para poner de manifiesto todo aquello a lo que el hombre puede llegar cuando es dominado por las ambiciones políticas, geográficas y económicas. Pero dentro de todos los conflictos armados por los que ha atravesado la humanidad, especialmente nos llama la atención la guerra Anglo Zanzibariana, la más corta de la historia.
Ahora bien, el hecho de que el conflicto durara menos de una hora, no implicó que no fuese lamentablemente sangriento. Los participantes fueron la potente Inglaterra y el pequeño reino de Zanzíbar, un archipiélago en medio del océano Índico, que en la actualidad es una región semiautónoma de Tanzania, y que durante años ha formado parte de las llamadas Islas de las Especies, tierras plenas de pimienta, canela, nuez moscada y clavos. Acompáñanos en Supercurioso a conocer la historia detrás de la guerra Anglo Zanzibariana.
¿Cuál fue la guerra Anglo Zanzibariana?
Cuarenta y cinco minutos, solo tres cuartos de hora y se vio resuelta la batalla más efímera de la historia, el enfrentamiento bélico más fugaz entre una gran potencia y el pequeño reino de Zanzíbar, que aunque discreto, fue lo suficientemente orgulloso como para atreverse a retar nada más y nada menos que al Imperio de su graciosa Majestad allá por el siglo XIX. No es habitual encontrar la referencia a este acontecimiento en los manuales históricos o en las enciclopedias. De ahí que deseemos explicarte qué originó este curioso y desigual enfrentamiento donde llegaron a movilizarse varias flotas navales y donde, aunque no lo creas, hubo más de 500 bajas…
1. Las causas de la guerra más corta del mundo
Corría el año 1896 cuando se sentaron las bases de la que sería la guerra más corta de la historia. Para comprender el contexto sociopolítico en el que ocurrieron los hechos, es necesario recordar que para aquel entonces el reino de Zanzíbar gozaba de una aparente independencia, en la que las órdenes eran dadas por un Sultán. Sin embargo, la pequeña población estaba bajo la protección del Reino Unido, así que bajo las cortinas de la política, era esta potencia la que manejaba los hilos del poder.
La mecha de la guerra Anglo Zanzibariana se prendió con la muerte de un Sultán, un hombre poderoso llamado Hamad Bin Thuwaini que tuvo hasta su final muy buena relación con el Imperio Británico. En efecto, los lazos entre Zanzíbar e Inglaterra eran tan cordiales que incluso se proyectaba una estrecha colaboración con la administración colonial. Pero el primo del Sultán que lo sustituyó en el cargo no pensaba de igual modo… tanto es así que propició un golpe de estado viendo que los británicos intentaban por su parte situar en el poder a otro nativo afín al Imperio.
Las ínfulas de grandeza de este personaje serían determinantes en el armado de la guerra Anglo Zanzibariana, una batalla del todo absurda. Sayyid Khalid Bin Barghash al-Basaid era su nombre, y fue sultán por tan solo unas 42 horas, luego de suceder a su primo, en torno a cuya muerte súbita también se tejieron hipótesis turbias. Ya este primo había practicado el envenenamiento con la intención de tomar el poder. El hecho es que, una vez hecho sultán y receloso de que los ingleses volvieran a tener las riendas de su país, se apresuró en formar un ejército de 2.800 hombres, valiéndose además de un yate armado, el H.H. Glasgow, y fortificando con todos los recursos de los que disponía, las defensas del palacio real. Nada de ello sería suficiente.
2. El inicio de la guerra Anglo Zanzibariana
Los ingleses, viendo el súbito despliegue del incauto primo del Sultán, decidieron prepararse para sofocar cualquier revuelta desplegando una auténtica prueba de fuerza. Para ello, se prepararon con cinco naves de guerra: tres cruceros, el Edgar HMS St George, el Archer HMS Racoon, el HMS Sparrow, dos cargueros de armas y varias compañías de Marinas Reales. Y, como si esto no fuera suficiente, se sumaron a los contingentes dos batallones de soldados comandados por un experto general de la guardia real.
Cuando el primo del Sultán vio todo aquel despliegue su grito de guerra quedó un poco afónico. No esperaba esa reacción, pero aun así no se echó atrás, en absoluto… la guerra se declaró a las nueve de la mañana del 27 de agosto de 1896, instante en que la Marina Real empezó a abrir fuego. El palacio quedó derrumbado de inmediato mientras el primo del Sultán corría a buscar asilo a la embajada alemana, donde lo acogieron y protegieron. Seguramente desde allí pudo escuchar los ecos del temible bombardeo contra sus soldados y su nave, y el estrepitoso fracaso de la guerra Anglo Zanzibariana.
3. El fin de la guerra, 45 minutos después
Los ingleses quizás tenían plena conciencia de que se enfrentaban a la guerra más corta de la historia, pero aun así, se enfrascaron en dejar por sentado su poderío y superioridad. 500 bombas fueron arrojadas sobre el territorio. 4.100 cartuchos de ametralladora y 1.000 cartuchos de rifles acabaron con el ejército armado a tanta velocidad. Unos minutos después, el complejo palaciego ardía en llamas, la artillería estaba destruida y los soldados del sultán habían muerto o emprendido una retirada aterrorizada. También fue a dar al fondo del mar el navío Glasgow del Sultán, la única embarcación poderosa de su tropa. Tan solo 45 minutos duró la guerra Anglo Zanzibariana, y fueron más que suficientes para que Inglaterra literalmente aplastara a este pequeño territorio.
Quienes han estudiado la guerra Anglo Zanzibariana defienden dos hipótesis diferentes. La primera apunta a que a los primeros tiros el Sultán huyó del palacio, refugiándose en la embajada alemana. Otros dicen que permaneció más tiempo, tratando de hacer frente a la batalla, pero en todo caso terminaría pidiendo auxilio a los alemanes. Una vez se alzaron con la rápida victoria en la guerra más corta de la historia, los ingleses solicitaron la extradición del Sultán, pero no lo consiguieron. Permaneció allí hasta que pudo marcharse hasta la región del África Oriental Alemana a bordo del navío germano SMS Seeadler. Curiosamente, el causante de la guerra Anglo Zanzibariana fue capturado años después, durante la Primera Guerra Mundial, y exiliado a la isla de Santa Elena. Tal fue su suerte que logró tiempo después volver al África y murió en Mombasa, en el año 1927.
Y tú, ¿Conocías sobre la guerra más corta de la historia? Menos de una hora duró el conflicto, pero se llevó las vidas de 500 soldados del ejército de Zanzíbar. Una batalla que para los ingleses fue como matar a una mosca con un periódico, y que terminó en el luto de un país.