Los episodios amorosos entre dioses, semidioses y humanos se repiten en la mitología griega. En pocos casos tienen un final feliz y, especialmente desde la óptica actual, muchos de ellos nos resultan incomprensibles. Los Dioses Griegos toman a la fuerza a las féminas y en muchos casos éstas resultan además castigadas, como es el caso del Mito de Medusa. En el Mito de Apolo y Dafne, las venganzas divinas juegan un papel principal y lo convierten en un curioso ejemplo de Amor en la Mitología Griega. Por ello, hoy en Supercurioso te proponemos acompañarnos a conocer qué ocurrió en el mito de Apolo y Dafne.
El Mito de Apolo y Dafne: el Amor en la Mitología Griega
Apolo era hijo de Zeus (aquí puedes consultar Quién es Zeus y conocer a los otros Hijos de Zeus) y la titánide Leto, siendo además gemelo de Artemisa, la diosa de la caza. Las andanzas amorosas de Apolo son notorias y abarcan relaciones tanto con féminas como con varones. De hecho, si quieres conocer a sus principales amantes de ambos sexos, así como los mitos sobre estos amores, puedes leerlos aquí: Los amantes del dios Apolo.
En lo que respecta a Dafne, te intereserá saber que su nombre, proveniente del griego «Δάφνη», que significa «laurel», íntimamente ligado a la historia que nos cuenta el mito de Apolo y Dafne.
1. Quién era Dafne
Dafne era una náyade; las Náyades son ninfas que habitan en fuentes, pozos, manantiales, arroyos y en general en los cuerpos de agua dulce. Son seres femeninos que viven muchos años, aunque no son inmortales. Su fuerza vital suele proceder del estanque o río en el que viven.
Nuestra protagonista era hija de un dios-río llamado Ladón y de la ninfa Creusa (algunos autores le dan otros progenitores, pero su padre siempre es un río). Cuenta el mito que Ladón deseaba que su hija tomara esposo y le diera nietos, pero Dafne le suplicó que no la obligara a casarse. El dios-río accedió a su petición y ella pudo seguir el ejemplo de la diosa Artemisa y consagrarse a la caza y a los bosques, permaneciendo virgen.
2. El mito de Apolo y Dafne
Sin embargo, el carácter soberbio de Apolo modificó el curso del destino. El dios Apolo vio a Eros disparando una de sus flechas y lo insultó diciéndole que sus habilidades no eran comparables con las de un hombre y sus flechas no tenían fuerza. Eros, ofendido, decidió demostrar a Apolo el poder de sus saetas amorosas y le disparó una flecha dorada haciendo que, inmediatamente, sintiera un amor irresistible por Dafne. Al mismo tiempo, Eros lanzó una flecha de plomo al corazón de Dafne cuyo efecto fue que sintiera desprecio y desdén por el dios y que huyera sin querer saber nada de él.
Apolo persiguió a Dafne incansablemente. Cuando finalmente la alcanzó, Dafne rogó a su padre el dios-río que la ayudase y éste la convirtió en un laurel. Ovidio describe así el momento: «Un entumecimiento pesado se apoderó de sus extremidades, una corteza delgada se cerró sobre su pecho, su cabello se convirtió en hojas, sus brazos en ramas, sus pies, tan rápidos un momento antes, quedaron atrapados en raíces de crecimiento lento, su rostro se fundió en la copa. Sólo quedó su brillante belleza…».
Viendo la transformación, Apolo abrazó el árbol de laurel en que se estaba convirtiendo y al finalizar la transformación le dijo que ya que jamás sería su pareja, por lo menos sería su árbol sagrado y con el laurel coronaría a los vencedores en su memoria. Según el mito, el laurel-Dafne agitó la copa en una señal de consentimiento.
3. Castidad contra lujuria
El mito de Apolo y Dafne se ha planteado a lo largo de los siglos como una oposición entre la castidad y la lujuria. Dafne representa el deseo de mantenerse virgen incluso desoyendo los deseos de su padre, que deseaba tener un yerno y unos nietos, frente al desenfrenado deseo de Apolo, que finalmente no consigue su meta. Dafne prefiere convertirse en un laurel a ceder ante su amante y así consigue la castidad eterna.
4. El laurel como símbolo de triunfo
Como hemos dicho, Dafne significa «laurel» y en este arbusto se convirtió la náyade. Es un arbusto de hoja perenne y flores perfumadas del que existen alrededor de 90 especies (si quieres descubrir especies más peculiares, nuestro artículo sobe Árboles Raros del Mundo no tiene desperdicio). Es a través del mito de Apolo y Dafne que el laurel se convirtió en uno de los atributos de Apolo y la planta fue utilizada tanto en los sacrificios dedicados al dios como en las victorias en los juegos en su honor que se hacían en Delfos. En estos juegos, celebrados cada cuatro años, se entregaba a los ganadores una corona de laurel como premio.
Finalmente, fue en toda Grecia donde se utilizaron estas coronas de laurel como premio tanto a atletas como a artistas, poetas o músicos. Hasta la actualidad ha llegado la palabra «laureado», que se aplica a aquella persona que «ha recibido una condecoración o un premio por un mérito, generalmente artístico».
Además del Mito de Apolo y Dafne, no te pierdas…
Si te ha gustado conocer el mito de Apolo y Dafne y quieres seguir profundizando en el mundo de la mitología griega, entonces no te pierdas nuestro post sobre Mitos Griegos Cortos. Además, te animamos a que le eches un vistazo a esta recopilación de Frases de Mitología Griega para conocer su importancia y, si dispones de mayor tiempo, hacerte con uno de estos Libros de Mitología Griega. ¿A qué esperas? ¡Te costará decidirte por uno!
El mito de Apolo y Dafne ha sido repetidamente representado a lo largo de la historia y las obras de arte se centran generalmente en el momento de la transformación de Dafne en un arbusto de laurel. La más conocida de ellas es posiblemente la escultura de Bernini titulada «Apolo y Dafne». En ella las manos y brazos están tomando la forma de ramas y los pies empiezan a enraizarse al suelo.
Terminamos aquí nuestra aproximación al Mito de Apolo y Dafne, por lo que nos encantaría que dejaras un comentario con tus aportaciones. ¿Conocías el mito de Apolo y Dafne? ¿Qué piensas de la historia que relata? ¡Comparte con nosotros tu opinión! Estaremos encantados de leerte. 🙂