En la actualidad las máscaras son sinónimo de fiesta y diversión, pero cuando nos remontamos a la historia nos encontramos con que fueron utilizadas con fines bastante diferentes. Como por ejemplo, el caso de los antiguos egipcios, quienes utilizaban las máscaras como elemento central en los ritos funerarios. Continúa leyendo y conoce más sobre este interesante tema.
¿Por qué los egipcios crearon las máscaras funerarias?
Para los antiguos egipcios las máscaras conformaban uno de los elementos más importantes en todo lo concerniente a los rituales funerarios. Ellos eran unos fervientes creyentes en la vida después de la muerte, por lo que era de vital importancia preparar al fallecido para que pudiera superar todos los obstáculos en el mundo espiritual.
El objetivo primordial por el cual elaboraban estas máscaras funerarias era el de espantar a los malos espíritus, así como también el de proteger el alma del fallecido. Para poder lograrlo debían construir la máscara tratando de plasmar las facciones de la persona, ya que solo así se lograría establecer una verdadera conexión entre el espíritu de la persona y la vida espiritual, aunque cabe resaltar que esta imagen era muchas veces idealizada. Otro de los objetivos que se perseguían era el de honrar al fallecido.
Aunque los egipcios siempre utilizaron estas máscaras, su uso se impulsó especialmente en el período greco-romano, pasando a ser parte fundamental de todo el proceso que buscaba preservar el cuerpo después de la muerte. En algunas ocasiones la máscara era colocada directamente sobre el rostro del difunto, en otras era acoplada a la parte exterior del ataúd.
En un principio los materiales utilizados para la elaboración de las máscaras era yeso a base de cal, madera, lino y fibras. La técnica para moldear y perfeccionar las facciones del difunto era la conocida como cartonaje, aunque posteriormente fueron evolucionando hasta perfeccionarla y lograr espectaculares resultados. Los materiales para la elaboración de la máscara, así como la mano de obra también dependían del estatus social del fallecido.
Una de las máscaras funerarias egipcias más espectaculares y conocidas de la historia es la del famoso faraón Tutankamon. Esta máscara de oro estaba completamente incrustada en el rostro momificado del faraón. Fue descubierta en el año 1922 por Howard Carter en el Valle de los Reyes.
Las máscaras egipcias eran una de las piezas claves de su cultura y creencias. Para poder traspasar con éxito todos los obstáculos del más allá era necesario llevar esta máscara, entre otros elementos, ya que solo así el difunto podría encontrar la paz.
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