Son pocas las mujeres que han pasado a la historia, por mérito propio, hasta hace pocas décadas. En la antigüedad, la posición de la mujer reducida casi exclusivamente al papel de esposa y madre, no le permitía sobresalir prácticamente en ninguna esfera. En Supercurioso hemos conocido a algunas que sí lo consiguieron en diversos campos: María la Judía en la química, Michaelina Wautier en el arte, Metrodora en la medicina o Juana de Arco en la guerra. Como gobernantas y reinas nos hemos acercado a Cleopatra, faraona de Egipto o a Zenobia, reina de Palmira y en esta ocasión queremos descubrir quién fue Semíramis, la legendaria reina Asiria. ¡Descubre su leyenda!
Semíramis, la legendaria reina de Asiria
La figura de Semíramis está rodeada de leyenda, pero sus historias parecen estar basadas en una reina real que vivió en el siglo IX a.C. La reina Shammuramat, viuda del rey Shamshi-Adad V de Asiria, que gobernó durante la minoría de edad de su hijo. El ser una mujer y los logros de su reinado, rodearon a Semíramis de este aura legendaria y fue especialmente Diodoro de Sicilia el que explicó sus fantásticas historias, basándose en lo que relató Ctesias de Cnido, el médico e historiador griego del siglo V a.C. A ella se le han atribuido monumentos, obras civiles y victorias de las que se desconocía el origen o el autor.
1. Semíramis, una reina de leyenda
Semíramis, según la leyenda, era el fruto de los amores de la diosa pez Dèrceto y de un joven sirio. Cuando nació, su madre, avergonzada, la abandonó en una zona desértica para que muriera. Sin embargo, unas palomas la encontraron y la alimentaron con leche y queso que robaban de un campamento de pastores que estaban asentados en las montañas vecinas. Ante los robos, los pastores pidieron ayuda al jefe de los pastores reales que descubrió a la niña. La recogió y la crió él mismo, poniéndole por nombre Semíramis que significa «la que viene de las palomas».
Un día, cuando ya era una joven, apareció por la montaña el consejero del rey Ninus, Oannes, gobernador de Siria. Se enamoró de ella y se la llevó a Nínive. Se casaron y tuvieron dos hijos. La inteligencia de Semíramis hacía que su esposo le pidiera consejo con frecuencia y sus aciertos llegaron a oídos del rey Ninus. Con ocasión de una expedición contra la ciudad de Bactra, Oannes hizo llamar a su esposa ya que la echaba de menos. Una vez allí, Semíramis observó como se llevaba a cabo el asedio de la ciudad y vio que la ciudadela quedaba desprotegida por lo que ella misma se puso al frente de un pequeño grupo de soldados, escaló el acantilado y atacó por la retaguardia. Los bactrianos, tras el inesperado ataque se rindieron.
El rey Ninus quiso conocerla y se enamoró de ella. Exigió a Onnes que se la entregase para casarse a lo que éste se negó suicidándose a continuación. El rey la tomó por esposa y tuvieron un hijo llamado Nínies (Ninyas). El mito difiere en este punto y una versión dice que Ninus murió en una batalla y otra que Semíramis lo mató. El resultado fue que la reina Semíramis fue la regente de su hijo durante muchos años.
Como reina de los asirios se le atribuye haber construido las murallas de Babilonia, edificado muchos palacios y encargado la realización de los maravillosos jardines colgantes. Incorporó a su imperio territorios como Libia, Etiopía o Egipto y solo fracasó en su intento de conquistar la India. Tras 42 años de reinado abdicó en su hijo y cuenta la leyenda que subió al cielo en forma de paloma.
2. La Leyenda de Semíramis y Ara el Bello
Esta leyenda armenia nos habla de uno de sus patriarcas, Ara el Bello, y su relación con Semíramis. Al parecer, la reina de Babilonia se enamoró de Ara que era un caudillo armenio de una belleza y apostura sobresalientes. Le pidió matrimonio, pero él la rechazó. Airada, decidió atacar Armenia y condujo a sus ejércitos a la batalla avisándoles de que no debían matar a Ara, sino capturarlo. Sin embargo, Ara murió en el combate y Armenia fue conquistada. Cuenta la leyenda que Semíramis, que era también una hechicera poderosa, rogó a sus dioses que devolvieran la vida al apuesto caudillo. En el ínterin, los armenios avanzaron contra los babilonios para vengar a su líder y Semíramis hizo disfrazar a uno de sus amantes como Ara. Las tropas armenias frenaron su ataque al ver a su líder vuelto a la vida. En algunas versiones, Semíramis consigue realmente resucitarlo.
El poeta Dante, en su obra La Divina Comedia, cuenta que la reina hizo un decreto que declaró el placer como algo permitido y ha partir de este dato se la ha descrito en numerosas ocasiones como una reina entregada al desenfreno y la lujuria. Dante situó a Semíramis en el segundo círculo del infierno (el de la lujuria), junto a Helena de Troya, Paris o Aquiles en su Infierno.
Según la tradición que se siga, los mitos relacionados con Semínaris la presentan de forma positiva o negativa. La reflejan como una reina cruel o como una gobernante magnánima, inteligente y victoriosa. Dante, en el Infierno de la Divina Comedia, la coloca con los lujuriosos en el segundo círculo, Lope de Vega nos la muestra como una mujer malvada y ambiciosa en sus sonetos y, sin embargo, la encontramos entre las mujeres valerosas que cita Christine de Pisan en su «Ciudad de las Damas». Los descendientes de los asirios que pueblan actualmente Irak, el noroeste de Irán, el noreste de Siria y el sureste de Turquía, aún conservan el nombre de Semíramis o Shamiram como nombre de pila para sus hijas en honor a la legendaria reina. ¿Sabías quién era Semíramis? ¿Conoces alguna otra leyenda sobre ella? ¡Compártela con nosotros! Estaremos encantados de leerla. Si te ha gustado conocer a una reina poderosa como Semíramis, permítenos proponerte estas Frases de Mujeres Fuertes y Empoderadas que seguro te encantarán y te harán reflexionar sobre el papel de la mujer en la historia.