Gatos negros. ¿Buena suerte o mala suerte? La leyenda y la superstición de los gatos negros han acariciado siempre la elegancia excepcional de estas criaturas a las que, históricamente, se ha asociado capacidades mágicas. Sus miradas encendidas irradian el color de la luna llena y su pelaje negro se extiende con la suavidad de esas noches oscuras, en las que las supuestas brujas leían el futuro y conjuraban sus hechizos. Su agilidad felina los hace moverse de un lado a otro con una sincronía asombrosa. Hoy en Supercurioso queremos presentarte las más interesantes curiosidades de los gatos negros. ¿Nos acompañas?
Son muchas las historias que han sido tejidas en torno a los gatos. Desde el misterio de por qué siempre caen de pie, hasta la rara expresión del sentido de la vista en los gatos. Pero peculiarmente con los que son de color negro, se ha asociado tradicionalmente la leyenda de la oscuridad. Acusados de representar a la brujería y de invocar a la mala suerte, estos animales han sido víctimas del rechazo e incluso de persecuciones para lastimarlos. A pesar de que la modernidad ha derribado muchos paradigmas errados, aún a los gatos negros les cuesta conseguir familia, y suelen ser los últimos en ser adoptados. Veamos a continuación los más interesantes datos curiosos de estos elegantes felinos.
7 curiosidades de los gatos negros que debes conocer
1. Los gatos negros y la diosa Bastet
Iniciamos este recorrido por las curiosidades de los gatos negros viajando hasta el Antiguo Egipto. En aquella sociedad, los felinos eran venerados y admirados. Pero los gatos de negro pelaje se asociaban en concreto a la diosa Bastet, protectora del hogar. Una entidad que traía a sus gentes el gozo de la vida, la armonía y la felicidad. Una vez más, podemos ver el gran amor que los egipcios profesaban a los animales en general. De hecho, si alguien llegaba a matar a un gato se consideraba un crimen capital.
2. Amuletos de alta mar
Nos vamos a la Inglaterra victoriana. ¿Crees que los gatos son símbolo de buena o de mala suerte en esta época? Buena, muy buena. De hecho, se cuentan entre las supersticiones marineras. Era frecuente ver gatos negros en la marina y en las embarcaciones de todo aquel que emprendiera un viaje a alta mar. Los gatos negros representaban también la buena suerte y la protección, y por si fuera poco, también les libraban de los ratones que pudiera haber abordo. Mientras, las esposas de los marineros también solían tener gatos negros en casa. Su figura les aseguraba que los maridos volverían a casa sanos y salvos.
3. La Edad Media, el peor momento para los gatos negros
Entre las curiosidades de los gatos negros destaca la tradicional asociación entre brujería, gatos y magia. Pero lo que quizás no sepas es que toda esta mala fama tuvo su origen y punto más dramático durante los años de la Edad Media, que fue sin duda el peor momento histórico para estos animales. Fueron años de oscurantismo y tradición, durante los que se pensaba que las brujas adquirían la forma de estos animales y que, por tanto, debían ser eliminados. El índice de gatos negros —y de gatos en general— bajó dramáticamente en este período. Esta leyenda sobre el mal augurio tiene aún especial preponderancia en países como Irlanda, en donde, si ves a un gato negro cerca de tu casa en una noche de luna llena, seguro pensarás que en unos días te será a anunciada una enfermedad.
4. Los gatos en Roma y su llegada a Europa
Seguimos con los aspectos positivos de las curiosidades de los gatos negros. Si viajamos hasta la Antigua Roma, descubriremos que en esta sociedad los gatos negros no solo eran apreciados, sino que además se les consideraba como símbolos de buena suerte. Incluso, fueron los romanos quienes introdujeron a los gatos en general en todo el territorio europeo. De ello derivan, aún hoy, influencias positivas. Es el caso de Escocia, en donde sus ciudadanos ven a un gato negro merodeando en los alrededores de su hogar y lo consideran un anuncio de futura prosperidad.
5. El gato negro de Carlos I de Inglaterra
Esta historia es bien curiosa: El rey Carlos I de Inglaterra tenía un gato negro. Lo adoraba. Pensaba que su precioso animal le ofrecía buena suerte y que le aportaba prosperidad. Tenía tanto miedo de perderlo que ordenó que fuera vigilado día y noche. ¿Y cómo terminó la historia? Finalmente, su gato negro falleció de viejo, justo el mismo día en que las tropas de Oliver Cromwell llegaron al palacio y arrestaron al rey. Días después, el rey Carlos I fue decapitado. Toda una tragedia…
6. Los gatos negros y sus ojos amarillos
Seguro que habrás escuchado hablar sobre el albinismo. Pero, ¿Conoces qué es el melanismo? Pues esta es la siguiente de las curiosidades de los gatos negros. El melanismo es un exceso de pigmentación que provoca el oscurecimiento de la piel, en este caso, del pelaje. Es justo este fenómeno el que hace que los gatos negros tengan esa intensidad oscura, pero también esos peculiares ojos amarillos que los hacen tan misteriosos. La gran cantidad de melanina en su organismo dota a su iris de esta tonalidad.
7. Su color de pelo puede cambiar con la edad o con el sol
Si vas sumando años a tu vida, quizás te sorprendas en el espejo con la aparición de algunas canas. Pues lo mismo puede ocurrir con los gatos negros. Su pelaje, de un negro impenetrable en la juventud, puede sufrir ligeras variaciones. Pueden aparecerles canas a medida que envejecen, o incluso si se exponen mucho tiempo al sol. También es común que por la exposición a la luz solar, partes de su pelaje se tornen de un color cobrizo.
Y tú, ¿conocías estas fascinantes curiosidades de los gatos negros? ¿Eres de los que adoran a estos elegantes animales? ¿O más bien crees en las supersticiones de que pueden ser brujas ocultas? Si te ha gustado este tema, no te pierdas nuestro artículo sobre Tashirojima, la isla de los gatos. Y si tienes un felino y lo adoras, deléitate con esta selección de las más lindas frases sobre los gatos.