Si la Inteligencia Artificial existe o no a día de hoy aún es una incógnita que no podemos aclarar. Lo que si tenemos es la definición del concepto conciencia. Gracias a un equipo internacional de neurocientíficos, podemos hacer una definición bastante exacta de lo que significa este término. Con esta definición, podremos establecer si nos estamos acercando a la Inteligencia Artificial con conciencia, teniendo en cuenta que tenemos tres tipos de conciencia. La Inteligencia Artificial con conciencia realmente no existe a día de hoy, pero podríamos llegar a construir estas «mentes» artificiales plenamente conscientes.
Resulta muy dificil explicar el término conciencia (con conceptos tan complejos como el libre albedrío), pero una buena definición podría ser la conciencia son las sensaciones y los pensamientos que las personas experimentamos de manera individual.
Si tenemos en cuenta que la conciencia está basada en las leyes descritas por la física y la química, es fácil pensar que deberíamos ser capaces de reconstruirla. El científico Alan Turing tenía el sueño de crear precisamente eso; un a máquina con un procesador que imitara el comportamiento del cerebro humano. A pesar de que aun no hemos alcanzado su sueño, hoy en día Turing estaría más que impresionado por los avances en este campo, como los que ha demostrado AlphaGo Zero de Google.
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Si la Inteligencia Artificial existe, ¿de qué manera podrá influir en nuestro futuro?
Realmente estas Inteligencias Artificiales son increíbles ya que son capaces de resolver problemas a unas velocidades extraordinarias, pero en cambio, la dificultad radica en que sean capaces de saber que pueden resolver dichos problemas, es decir, que sean conscientes de que pueden resolverlos. Ese esa es la cuestión de todo esto.
Tipos de conciencia
Se publicó en la revista Science el estudio de unos científicos que dividían la conciencia en tres categorías:
- C0: Corresponde a la categoría más baja, eso es, a la simple resolución de problemas que nosotros somos capaces de resolver sin necesidad de la conciencia, como por ejemplo conducir de vuelta a casa desde el trabajo. Esa es una acción que hacemos prácticamente sin darnos cuenta. Si extrapolamos esta habilidad a las máquinas, podríamos compararlo con los coches de conducción automática. En este punto comprobaremos que este nivel de conciencia ya la han alcanzado las máquinas.
- C1: sería el nivel de conciencia medio. Los científicos la describen como “la relación entre un sistema cognitivo y un objeto específico de pensamiento, como una representación mental de “la luz del depósito de gasolina”. En este nivel de conciencia, ese objeto de pensamiento está relacionado con el procesamiento global, desplazándolo de una estrecha relación a una que pueda manipular en varios contextos.
- C2: es la categoría más elevada de conciencia. Sería como un vigilante que observa todas y cada una de las tareas que tiene. Englobaría lo que se conoce como “metacognición” que se describe como la sensación de saber lo que sabemos. Se la conoce también como la “Teoría de la mente”.
Una vez descritos los diferentes tipos de conciencia, debemos tener en cuenta que la conciencia del tipo C1 puede darse sin necesidad de la C2 y viceversa pero, según los investigadores, ninguno de estos sistemas tiene, por ahora, su equivalencia en la Inteligencia Artificial.
¿Qué nos depara el futuro?
Existen, a día de hoy, empresas que están teniendo grandes avances en estos campos como es el caso de AlphaGo y DeepMind pero todavía les quedan muchos pasos que dar hacia la Inteligencia Artificial con conciencia. Los expertos en la materia lanzan sus especulaciones. Según ellos la conciencia tipo C1 evolucionó como una manera de romper la modulidad de los procesos de inconsciencia.
Los microchips, que gracias a los recientes avances, pueden procesar y almacenar información como lo harían nuestras propias neuronas, tendrían un claro e importante papel en la revolución de la tecnologías modular existentes.
Para poder decir que la Inteligencia Artificial existe, deberíamos primero saber mucho más a cerca de cómo nuestros cerebros crean esos espacios de trabajo global que llamamos conciencia.
Llegar a ese nivel C2 requerirá, según los investigadores, varios procesos, algunos de los cuales consistirá en aplicar la probabilidad de tomar decisiones y otros que tienen un tipo de meta-memoria que establezca una línea entre lo que se conoce y lo que se desconoce. De esa manera podríamos llegar a construir en un futuro máquinas con Inteligencia Artificial consciente inspiradas en nuestro propio “hardware” mental.
De cualquier forma, lo que veremos o dejaremos de ver en el futuro es una incógnita a día de hoy, y los avances tecnológicos son tan rápidos que apenas podemos ni imaginar lo que podría estar por venir. ¿A ti que te parecen todos estos avances? ¿Crees que la Inteligencia Artificial existe? Existe un gran debate sobre si será beneficiosa o no para la humanidad, ¿Tu que opinas? ¡Déjanos tus comentarios y estaremos encantados de leerte!