Los libros son un mundo aparte, en el que la creatividad, la imaginación y la historia personal o referencial se unen, para la creación de un universo propio. Navegar por las páginas de un libro es salir por un momento de nuestra realidad, para entrar en otra, esa que dibujan los personajes que viven entre sus páginas. Cúmulo de conocimiento y de ideas, son el soporte de la historia de la humanidad, en sus más distintas épocas y facetas. Es justo por ello que los episodios de quema de libros en el mundo han generado tanta polémica y siguen siendo vistos en la actualidad como una total abominación. Lanzar al fuego un libro es consumir también la cultura, el progreso y la libertad de pensamiento. Hoy en Supercurioso queremos contarte sobre las más difundidas y terribles quemas de libros en la historia. ¡Acompáñanos!
10 terribles casos de quema de libros en el mundo
Son millones las curiosidades que podemos encontrar cuando nos sumergimos en el universo de la literatura. Desde saber cuáles son los libros más vendidos del mundo hasta conocer aquellas historias que fueron escritas en la cárcel. Pero, la quema de libros en la historia es quizás de las facetas más terribles asociadas a este tipo de conocimiento.
En rigor, a estos detestables episodios se les asocia con fanatismos políticos o religiosos. De hecho, han respondido a las absurdas necesidades de figuras de poder de demostrar, a través del miedo y la exhibición pública, su dominio frente a autores que contrarían sus dogmas.
Hablar de qué simboliza la quema de libros es reconocer una de las más oscuras facetas del ser humano: la intolerancia. El simbolismo es clave, es aleccionar y dar fuego a todo aquel que piense distinto. A continuación, repasaremos los casos más terribles de quema de libros en la historia.
1. La quema del Emperador Qin Shi Huang
La primera quema de libros en la historia de la que se tiene noticias proviene de China: el emperador Qin Shi Huang, en el año 212 a.C., no solo quemó obras invalorables, sino que también asesinó a académicos e intelectuales. A quienes desobedecieron la orden de arrojar los libros a las llamas, los enterró vivos. Pero hay quienes dudan de que haya sido así. Bajo su mandato se edificó la Gran Muralla China.
2. La Biblioteca de Alejandría
Y siguiendo en el tiempo antiguo, uno de los más horribles casos de quema de libros en el mundo fue el ocurrido en la biblioteca de Alejandría. El emperador romano Diocleciano también mandó a quemar los libros de alquimia de esta biblioteca, en el año 292 a.C.
Esto fue una verdadera tragedia, en la que se perdió al menos un 75% de toda la literatura, la ciencia y la filosofía griega. Aquella extraordinaria biblioteca permaneció por siete siglos en pie, hasta que, por una orden mezquina, se convirtió en cenizas.
3. La quema de los códices mayas
La cultura maya también sufrió un horrible episodio de quema de libros en el mundo. Fue a mediados del siglo XVI, cuando el sacerdote Diego de Landa hizo de las suyas con los códices mayas: “Hallámosles gran número de libros de estas sus letras, y porque no tenían cosa en que no hubiese superstición y falsedades del demonio, se los quemamos todos”. Sucedió en Yucatán en 1562.
4. La hoguera de las vanidades
Otra famosísima quema de libros en la historia fue la de Girolamo Savonarola, un monje dominico, que predicó en contra del lujo, la depravación de los gobernantes y la corrupción de la iglesia católica. En Florencia, donde él vivía, organizó las “hogueras de las vanidades”, donde todos estaban invitados a arrojar objetos de lujo, cosméticos y, por supuesto, libros licenciosos.
Giovanni Boccaccio fue uno de los autores incluidos. Atacó frontalmente al entonces papa, Alejandro VI (Rodrigo Borgia) y por ello fue excomulgado, preso y finalmente quemado él también en la hoguera. Su propia obra fue incluida en el Índice de libros prohibidos.
5. La biblioteca de la Madraza
A comienzos del 1500, tuvo lugar la quema de la biblioteca de la Madraza, la primera universidad que existió en Granada, España. Esto lo hizo el cardenal Cisneros, y se llamó la “Quema de Bib-Rambla”. A raíz de semejante crimen, las autoridades castellanas impusieron los “Decretos de Juana de Castilla”, que consistieron en la obligación de los andalucíes de entregar a éstas los libros escritos en árabe; los que no trataran sobre filosofía, medicina o historia les serían devueltos. Pero los demás irían a la hoguera.
6. La quema de libros de los Nazis
Hubo un importante lapso en el que la quema de libros en el mundo dejó de ser noticia, casi 400 años, al cabo de los cuales se organizó la que tal vez fue la quema de libros más “ordenada” y terrible de la historia: la de los nazis en 1933. Lo que quizá resulta más chocante es que fue una campaña liderada por una organización de estudiantes, la Unión Estudiantil Nacionalsocialista, en contra de autores judíos, marxistas y pacifistas, a quienes se consideraban anti alemanes.
Esta fue la quema de libros en la historia más planificada y se realizó en la Opernplatz, ante la Universidad Humboldt. Constituyó la mecha que encendió la peor purga de libros que haya existido: en 21 universidades alemanas hubo quemas de libros, donde estudiantes y profesores arrojaron libros.
Para asegurarse de quemar todo, los nazis hicieron “listas negras”, divididas en seis categorías: Bellas Artes, Historia, Artes, Política, Historia y Religión, filosofía y pedagogía. Entre los numerosísimos autores incluidos podríamos citar a Bertolt Brecht, Asch Schalom, John Dos Passos, Máximo Gorki, Ernest Hemingway, Jack London, Gustav Meyrink, Joseph Roth o Stefan Zweig.
7. La quema de libros de Perón
Pero el horrible episodio de quema de libros en el mundo no está reservado sólo al viejo continente. En Argentina, en 1943, la dictadura de Juan Domingo Perón cerró y quemó todos los libros de las editoriales comunistas del país. Y otra vez, en 1976, durante la dictadura del general Jorge Rafael Videla, ardieron en las llamas un millón y medio de libros: los de Marcel Proust, Gabriel García Márquez, Julio Cortázar, Pablo Neruda, Mario Vargas Llosa, Antoine de Saint-Exupéry, Eduardo Galeano y muchos más.
Una de las mayores quemas de libros argentina se hizo bajo las órdenes del general Luciano Benjamín Menéndez, en Córdoba, diciendo que lo hacía “para que no quede nada de estos libros, folletos, revistas y no se siga engañando a nuestros hijos. De la misma manera que destruimos por el fuego la documentación perniciosa que afecta el intelecto y nuestra manera de ser cristiana, serán destruidos los enemigos del alma argentina”.
8. La quema de libros de Pinochet
Otra referencia sobre la quema de libros en la historia latinoamericana, ocurrió en Chile. Luego de que Augusto Pinochet derrocara a Salvador Allende, también se dedicaron a las quemas de libros, en 1973. En el país sureño ha rodado lo que tal vez sea una leyenda urbana: dicen que militares pinochetistas, mientras buscaban libros marxistas, encontraron en la casa de Pablo Neruda algunos libros sobre el cubismo, y los quemaron creyendo que trataban sobre la Cuba castrista.
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9. La Biblioteca Nacional de Bagdad
En el año 2003 ocurrió también un terrible episodio de quema de libros en el mundo. En medio de una serie de eventos violentos, fueron destruidos por principales centros culturales de Irak. Con ello, una ola de saqueos desmanteló los edificios públicos en Bagdad. Uno de los primeros en caer fue la biblioteca, que lamentablemente no fue saqueada, sino rociada con combustible y prendida fuego. Millones de libros se quemaron.
10. La quema de libros del Estado Islámico
Tampoco puede pasarse por alto la purga que hizo el grupo terrorista Estado Islámico, cuando en 2015 quemó más de 8.000 libros y destruyó obras de arte de la humanidad.
Destruir o quemar libros es una práctica abominable que jamás debería repetirse. Si te ha interesado este artículo y eres, como nosotros, un apasionado de la literatura, no te pierdas este otro en el que te contamos sobre la biblioteca con las obras más extrañas del mundo.