¡Muertos vivientes! No es una película, es el síndrome o fenómeno de Lázaro o también llamado resurrección espontánea, una extraña condición, en la cual los fallecidos regresan a la vida.
Existen muchos hechos curiosos relacionados con la muerte y en Supercurioso te hemos hablado de algunos de ellos, como las caras de la Muerte según distintas culturas o supersticiones victorianas relacionadas con la muerte.
En esta ocasión, te traemos uno de los fenómenos más extraños del mundo que dejan a cualquiera boquiabierto. Muchos médicos quedan asombrados porque después de reportar el fallecimiento, la persona resucita. El síndrome de Lázaro o resurrección espontánea es uno de los misterios más desconcertante en la medicina. ¡Acompáñanos a conocerlo!
¿Qué es el síndrome o fenómeno de Lázaro?
El síndrome de Lázaro hace referencia a una recuperación de los signos vitales luego de determinar el fallecimiento del paciente. Es usual que este fenómeno ocurra entre 10 a 15 minutos de la muerte y crece las probabilidades cuando se ha realizado una reanimación cardio pulmonar con anterioridad. Sin embargo, existen casos documentados que detallan la aparición del síndrome después de consumir sustancias alucinógenas recreativas.
Por tal motivo, los médicos siguen una serie de protocolos para asegurar que el paciente realmente haya fallecido. No es de extrañar que en la edad media las tumbas tuviesen una campana, por si acaso el muerto volvía a vivir. Sí, hubo muchos casos específicos donde la persona regresaba a la vida luego de su supuesta muerte.
En la actualidad, los profesionales en la salud determinan la muerte del paciente teniendo en cuenta los siguientes factores:
- Pérdida de la conciencia irreversible hasta el punto de ignorar los estímulos externos.
- Evidencia de daño cerebral irreversible.
- Ausencia del proceso automático respiratorio.
En pocas palabras, el síndrome de Lázaro se le conoce al fenómeno de la recuperación espontánea de la circulación sanguínea después de varios intentos de reanimación cardio-pulmonar que han resultado fallidos.
Toma su nombre del episodio bíblico en el que Jesús resucita a su amigo Lázaro, que hacía varios días que había fallecido. Este ha sido registrado en Juan: 1, 43 y dice: «Y habiendo dicho estas cosas, clamó, a gran voz: ¡Lázaro ven fuera!».
¿Por qué ocurre el síndrome de Lázaro?
Muchos expertos aseguran que el síndrome de Lázaro ocurre por una acumulación de presión en el tórax debido a la reanimación cardio pulmonar. Cuando tal procedimiento es detenido, entonces la presión se libera poco a poco para poner en marcha el corazón. ¿Puedes creerlo?
Aunque existen algunas explicaciones científicas y espirituales, la realidad es que la fisiopatología de este fenómeno no es clara. Pese a eso, hemos considerado las siguientes causas del síndrome de Lázaro desde el punto de vista médico:
- Hipercalemia: concentraciones peligrosas de potasio en la sangre.
- Dosis elevadas de epinefrina durante las maniobras de reanimación cardio pulmonar.
- Placas en las arterias coronarias que terminan desprendiéndose y causando una recirculación.
- Ausencia momentánea de la actividad eléctrica del miocardio después de una maniobra de desfibrilación.
- Reflejo óculo-cardiaco, es decir, reducción de la frecuencia cardiaca hasta un punto crítico donde el paciente parece estar muerto.
- Recuperación del corazón frente a un evento isquémico o falta de irrigación sanguínea hacia este órgano.
Lo anterior hace complejo el declarar muerto a un paciente porque existen muchos factores a tener en cuenta. Por ejemplo, los minutos del supuesto fallecimiento, la edad del paciente, y si hay actividad cerebral, aunque esté reducida.
Para las personas de común, es usual escuchar comentarios como “A él no le tocaba todavía”, “Dios le dio una segunda oportunidad para vivir”, “Aún tiene cosas por hacer en el mundo”. Sea cualquier explicación, la realidad es que el síndrome de Lázaro es un fenómeno extraño y sorprendente.
Testimonios del síndrome de Lázaro
Desde 1982 se tiene constancia de más de 38 casos totalmente documentados en que se había certificado la muerte y hubo una resurrección espontánea, entre los más conocidos encontramos estos tres:
1. Sobredosis y resurrección
El primero explica el caso de un británico de 27 años que sufrió una sobredosis de heroína y cocaína, sufrió un paro cardíaco durante su traslado al hospital y tras 25 minutos de trabajo de reanimación se le dio por muerto. Un minuto después, una de las enfermeras notó que había movimiento en el monitor conectado al corazón del paciente. Este finalmente se recuperó por completo.
2. Despertar entre cadáveres
Otro caso famoso es el de la ciudadana norteamericana de 61 años Judith Johnson, que en 2007 sufrió un paro cardíaco estando en un centro médico. Se le aplicó medicación y se utilizó el desfibrilador, pero los médicos no consiguieron recuperarla.
Fue declarada muerta y trasladada al depósito de cadáveres, donde un tiempo después se dieron cuenta de que estaba viva y respirando con normalidad. La mujer demandó al centro médico.
3. ¿20 minutos de muerto?
En 2002, la revista «Forensic Science International» se hizo eco de lo acaecido con un japonés de 65 años afectado por la sordera, que fue hallado inconsciente en la casa de acogida en la que vivía. Intentaron recuperarlo en el hogar y en el servicio de Urgencias del hospital, tanto farmacológicamente como con el desfibrilador, pero sin conseguirlo.
Fue declarado muerto y llevado al depósito de cadáveres donde 20 minutos. Después, un policía se dio cuenta de que uno de los supuestos muertos se movía. Recuperado, sobrevivió únicamente 4 días más.
Los médicos siguen intentando averiguar con certeza cómo se produce esta «resurrección», ya que no están seguros de su causa. Piensan que puede deberse a la relajación de la presión ejercida durante el proceso de reanimación, que permite al corazón expandirse, reactivar los impulsos eléctricos y ponerse en marcha o por los altos niveles de potasio que retrasan el retorno de la circulación espontánea.
Actualmente, los protocolos médicos aconsejan no certificar el fallecimiento hasta pasados 10 minutos de la finalización de la reanimación, por si se produjera esta «resurrección» o síndrome de Lázaro.
También se conoce en círculos psiquiátricos como «síndrome de Lázaro» las dificultades que sufren las personas que se han enfrentado a la certeza inminente de su propia muerte y finalmente han sobrevivido.
¿Habías oído hablar de este síndrome? ¿Conoces algún caso interesante? ¡Compártelo con nosotros!
Otros síndromes curiosos
Si bien el fenómeno de Lázaro nos ha parecido muy interesante, sabemos que este mundo está lleno de curiosidades y extrañezas. Por eso, hemos recopilado esta serie de síndromes raros y curiosos que de seguro te encantará.
- Síndrome de Cotard, el delirio de creer que estás muerto.
- Síndrome de Enclaustramiento, sentirte atrapado dentro de tu propio cuerpo.
- Síndrome de Amok, la enfermedad de los asesinos en serie.
- Síndrome de Fregoli, conocer a desconocidos.
- Síndrome de Stendhal, cuando el arte duele.
- Síndrome de Noé, acumular animales.
- Síndrome de Estocolmo, enamorarse de tu secuestrador.
- Síndrome de Münchhausen, provocarse enfermedades.
-
Síndrome de Resignación, alejarse de la vida por un tiempo indefinido.
-
Síndrome de Gourmand, la enfermedad que te convierte en chef.
- Síndrome de Pica o Alotriofagia, comer cosas no comestibles.