Las curiosidades de Roma nos llevan en un extraordinario viaje por una de las ciudades más despampanantes del mundo. En ella, la modernidad convive con las remotas glorias de un pasado que quedó atrás hace milenios. En Supercurioso nos declaramos fanáticos de este tema. Ya en otras ocasiones te hemos contado sobre cómo era la vida de las mujeres romanas o sobre los tipos de gladiadores. Pero en esta ocasión queremos lanzar una mirada general sobre las curiosidades del Imperio Romano. Augusto, Julio César, Constantino y Pompeyo son algunos de los nombres que nos llegan al recordar la historia de un Imperio que dominó un poder sin igual. Acompáñanos a profundizar en las más interesantes curiosidades de la Antigua Roma.
Las 10 curiosidades de la Antigua Roma más interesantes
1. La sangre de los gladiadores era de buena suerte
Iniciamos este recorrido por las curiosidades del Imperio Romano hablando de los gladiadores. Como vimos entre las curiosidades del Coliseo Romano, este era el anfiteatro más importante del Imperio. En él, los espectáculos más populares eran las luchas de gladiadores, ya fueran entre ellos mismos o contra bestias salvajes, y eran combates hasta la muerte. Pero el dato que pocos saben es que los antiguos romanos pensaban que los gladiadores que ganaban las contiendas eran hombres de buena suerte, motivo por el cual los espectadores buscaban con desesperación conseguir aunque sea algunas gotas de la sangre derramada por el guerrero victorioso.
2. Sudor de gladiador, tónico de belleza
Otra de las curiosidades de la Antigua Roma, que en la actualidad nos resultarían bastante desagradables, es el hecho de que los pobladores de aquellos años creían que el sudor de los gladiadores era un efectivo artilugio de belleza. Las mujeres hacían cremas para el cuerpo con este líquido. Inclusive, algunas damas de la alta sociedad podían llegar a pagar grandes sumas de dinero para pasar la noche con un atleta o gladiador, siempre con la condición de que no se bañaran después de la lucha.
3. Un caballo como Cónsul
Los Emperadores también son protagonistas de muchas de las mejores curiosidades del Imperio Romano. Uno de los mandatarios que se hizo más famoso por sus constantes locuras fue Calígula. Se recuerda entre sus actos más delirantes el de nombrar su caballo Incitatus con un alto cargo de gobierno, específicamente como Cónsul, cuya principal función era comandar los ejércitos. ¿Qué te parece?
4. Incestos y violaciones de Calígula
Si hablamos de los tiranos más excéntricos de la Antigua Roma, nos encontramos con nombres como el de Caracalla, Valeriano o Heliogábalo. Pero entre ellos, Calígula sigue teniendo un punto de honor. No solo por sus conductas sanguinarias, sino por su voraz apetito sexual. Se cuenta entre las más nefastas curiosidades del Imperio Romano el hecho de que este emperador tuvo relaciones incestuosas con sus tres hermanas. Además, cuando se encontraba en algún festín si le gustaba alguna de las damas allí presente, simplemente se levantaba, la violaba y luego se sentaba nuevamente en la mesa y contaba la experiencia al resto de los invitados. ¡Terrible!
5. Las extravagancias sexuales de Tiberio
La homosexualidad en la Antigua Roma ha sido un asunto de interés para investigadores y curiosos. En efecto, en esta civilización, la práctica era cosa cotidiana y bien vista, y se situaba muy lejos de las connotaciones negativas que tuvo después, motorizadas principalmente por el Catolicismo. Pero dentro de ello, algunos se daban el permiso para ciertas extravagancias. Era el caso del emperador Tiberio, que contrataba a jóvenes de ambos sexos a los que denominaba como “expertos del sexo anal”. Dichos jóvenes eran obligados a mantener relaciones sexuales en fila mientras él los observaba.
6. La depilación por higiene
Y otra de las curiosidades de la Antigua Roma que nos resultan muy interesantes, son los hábitos de cuidados diarios de los romanos. Aunque nos parezca una práctica moderna, la realidad es que tanto las mujeres como los hombres de esa época se depilaban con ceras o pinzas especiales, pues lo consideraban una cuestión de higiene.
7. Las crueldades de Nerón contra los cristianos
Una de las curiosidades del Imperio Romano que generan verdadero espanto, es la práctica que se atribuye al emperador Nerón. Sanguinario y violento, este mandatario condenaba a los cristianos a ser despedazados por fieras o también los crucificaba y les prendía fuego para que sirvieran como antorchas humanas. Un auténtico fanático de sí mismo, a Nerón también le fascinaban las obras teatrales en las cuales él mismo se representaba. Solía obligar a un auditorio de cinco mil caballeros a aplaudirlo hasta el cansancio en dichas puestas en escena.
8. El maquillaje de las romanas
Y sumamos a este listado de las más insólitas curiosidades del Imperio Romano, una que resulta bastante peculiar. Ya es sabido que para los romanos la estética, la higiene y la belleza eran cosa importante. Pero las mujeres gustaban de maquillarse, y para ello, fabricaban sus propias pinturas faciales a base de excrementos de cocodrilo o harina. Utilizaban la sustancia venenosa nitrato rojo para darle color a sus mejillas y los labios los pintaban con frutas podridas.
9. Los emperadores que bebían veneno
Si algo se mantiene presente y constante entre las curiosidades de la Antigua Roma, son las pugnas por el poder, las traiciones y los atentados. Pero los Emperadores romanos tenían una peculiar manera de protegerse contra ataques de enemigos cercanos y camuflados. Acostumbraban a beber una pequeña cantidad de veneno todos los días. ¿El objetivo? Acostumbrar a su organismo para que terminase por volverse inmune a ellos.
10. La noche de bodas
Y cerramos este interesante viaje por las curiosidades del Imperio Romano contándote acerca de la noche de bodas. Resulta que sobre ella los romanos tenían una tradición bastante particular. Si en la noche de bodas el hombre por algún motivo no era capaz de cumplir con su papel de quitarle la virginidad a su esposa, la misma era obligada a consumar el coito con una imagen de madera del dios Príapo. ¡Insólito! ¿No es así?
Las curiosidades de la Antigua Roma nos dejan ver un elemento bastante singular para el análisis. Una de las civilizaciones más importantes y trascendentes para la construcción de nuestra sociedad actual, fue también un perfecto ejemplo de excesos, crueldades y barbarie, que estaban completamente naturalizadas. Y quizás es de ese mismo hecho que se deriva el fin del Imperio Romano. Y es que, tal como dijo el político argentino Leandro Alem, en una de las mejores frases sobre Roma, «Por no tener ideales cayó la Antigua Roma, con toda su corte de bajezas y de inmoralidades». Un pensamiento que sin duda invita a la reflexión.