¿Cómo medir el tiempo? Desde hace miles de años, esta pregunta ronda todos los rincones del mundo. La sociedad del Antiguo Egipto, los sumerios, griegos y romanos, no fueron los únicos que crearon calendarios antiguos y legendarios; así como tampoco es verdad que todos los calendarios de la historia se han medido con números. De hecho, el paso de las civilizaciones han permitido que los calendarios se fueran transformando drásticamente. Por esta razón, en Supercurioso hemos querido contarte la historia de los calendarios antiguos. ¿Quieres conocerla? ¡Genial, acompáñanos! 🙂
Los calendarios más antiguos y famosos de la historia
Antes de dar comienzo a nuestra lista de los calendarios antiguos, primero debemos entender a cabalidad qué es, cuál es el origen del calendario y quiénes han sido sus creadores. Partamos de un hecho: el tiempo es una invención humana, por tanto los calendarios son una forma de dividir ese tiempo y ordenarlo de acuerdo a nuestras necesidades. Entonces, a grandes rasgos, el calendario es un sistema de división creado por los humanos para dividir el transcurso del tiempo en unidades (segundos, minutos, horas, días, meses, años, siglos, etc.).
¿Cómo lo logran? En realidad hay mil y una formas de hacerlo, no obstante, casi todos los calendarios antiguos se miden por la posición de la Tierra con respecto al sol o la luna; de esta manera a lo largo de la historia los calendarios han sido organizados de manera cronológica. ¿Lo tienes claro? ¡Perfecto! Ahora sí, vamos a los hechos…
1. Calendario Egipcio
Para dar comienzo a la historia de los calendarios antiguos nada mejor que hacerlo con el más preciso e importante de todos, el calendario egipcio. Llamado también Sotíaco, este calendario se basaba en el curso de la estrella Sotis, es decir, de Sirio, conocida también con el nombre de Can. Su aparición en el horizonte, poco antes de la salida del sol, entre el 19-21 de julio, anuncia aún hoy, la canícula estival. Es decir, el periodo del año más caluroso.
Los egipcios ya se habían dado cuenta de la falta de precisión en su calendario y por ello fue que en la III Dinastía (2647-2573 a.C.) se procedió a cambiarlo. Los creadores de uno de los calendarios más antiguos de la historia fueron los sacerdotes de una de las ciudades de Egipto, On, llamada Heliópolis por los griegos, y actualmente, uno de los pocos barrios de El Cairo.
Debes saber que este es uno de los calendarios antiguos que desde su creación gozaba de considerable prestigio, puesto que, entre los días 19-21 de julio, el agua del río Nilo llegaba hasta Heliópolis y Memphis. En resumen, el calendario egipcio es uno de los calendarios más importantes de La historia y constaba de 12 meses de 30 días cada uno, lo que da un total de 360 días, más días festivos extras. ¿Increíble, verdad? Todo con base en una simple estrella.
2. Calendario Babilónico
El punto clave de este calendario fue seguir los movimientos de las estrellas, del sol, de la luna, de algunos planetas y de los cometas, que permitió a los babilonios engarzar la astronomía con la mitología, la religión con la astrología, porque el sol y la luna fueron también sus dioses.
En ese afán de establecer uno de los calendarios más antiguos de la historia, los babilonios crearon un modelo compuesto por un año que constaba de 364 días, y se basaba en el movimiento del sol. La mediación de los meses la hacían tomando como parámetro el movimiento de la luna. Entonces, al computar los meses de acuerdo con el ciclo de las lunas llenas, el resultado sería 13 meses de 28 días.
Una de las similitudes de este calendario con los calendarios actuales, es que la semana estaba compuesta por 7 días y su origen se encuentra en el hecho de asociar un día con cada una de las divinidades identificadas con los 7 cuerpos celestes. ¿Sorprendente, verdad?
3. Calendario Maya
Los calendarios mayas fueron los más sofisticados de la historia de Meso América. De hecho, estos calendarios antiguos fueron el centro de su vida y su mayor logro cultural. Así como los dos calendarios anteriores, el maya contaba con una exactitud en la medición del tiempo, y algunos afirman que era mejor que los contemporáneos europeos.
Hemos de decirte que los mayas tenían muchos calendarios, pero dos eran los principales, eso sí, no servían para lo mismo. El agrícola (Haab) por un lado, era un calendario solar y se regía por el tiempo en que tarda la Tierra en darle la vuelta al sol, es decir, 365 1/4 días. Este movimiento de traslación da origen a las cuatro estaciones del año. De todos los calendarios antiguos, este es el único que entendía el ciclo en 18 meses, cada uno de 20 días (360 días) más 5 días extra.
Por otro lado, se encontraba el Tzolkin, es decir, el calendario religioso, era usado en especial por los sacerdotes que regulaban las ceremonias en honor a los dioses. Constaba de 13 meses de 20 días, o sea que el año estaba constituido por 260 días y se tenían en cuenta los ciclos del sol, de la luna y de Venus. Como dato curioso de uno de los calendarios de la historia más controvertidos, el Tzolkin comenzaba el 26 de julio correspondiente a nuestro calendario, el gregoriano. ¡Uno de los datos curiosos de México que no te esperabas!
4. Calendario Azteca
Continuando con nuestra lista de los calendarios más importantes de la historia, no podemos dejar de lado el azteca. Este calendario está completamente representado en la piedra del Sol, descubierta al practicarse una nivelación en la Plaza Mayor de Ciudad de México.
Fue en 1792 cuando Antonio de León y Gama hizo la descripción detallada de uno de los calendarios más antiguos encontrados en América. Según él, el calendario registra los movimientos de los astros observados y medidos por la cultura azteca, es decir, el sol, la luna, y Venus. Estos dieron lugar a dos calendarios diferentes… El primero se trata del Xiuhpohualli, que se compone de 18 meses de 20 días cada uno y de 5 días de inactividad. También suman 365 días y comienza el 2 de febrero de nuestro calendario. Cada 4 años se agrega un día más, que equivale al año bisiesto, y cada 130 años se suprime un día nemontemi.
Por otro lado, se encuentra el Xihuitl, que está compuesto por 18 meses de 20 días cada uno. No obstante, de todos los calendarios antiguos, este es el único que tenía una semana compuesta por 5 días. Los aztecas dividían este calendario en 5 periodos de 73 días que correspondían con las estaciones; Cogaa, el tiempo del agua y el viento; Col lapa, tiempo de la cosecha; Pye Chij, tiempo de las fiestas; Pye corgaa, comienzo del calendario; y Yoocho, tiempo de las enfermedades.
5. Calendario Juliano
Este es uno de los calendarios antiguos más populares de la historia, y se trató de una reforma de Julio César. Este aconsejado por el astrónomo Sosígenes, introdujo en el año 46 a.C., el calendario juliano, con el fin de acabar de una vez por todas con la arbitrariedad existente. La reforma consistió en los siguientes tres puntos:
- Alinear el calendario con las estaciones, para esto se añadieron 67 días en dos meses intercalares extras entre noviembre y diciembre.
- Añadió 10 días extra al año, redistribuyéndolos en los diferentes meses hasta dejarlos en la forma que hoy los conocemos; de esta manera el calendario tendría 365 días al año.
- Por último, se estableció un sistema donde se insertaría un día más cada 4 años, específicamente el 23 de febrero.
De este modo, en el año 45 a. C., Julio César incluiría uno de los calendarios más antiguos e importantes en la historia. No obstante, como dato curioso, debes saber que César fue asesinado en los días de marzo siguiente, y sus instrucciones no fueron interpretadas claramente, y durante 36 años se introdujeron un día bisiesto cada tres años en lugar de 4. Fue Augusto el que redimió este error en el año 8 a.C., estableciendo el periodo correcto y eliminando las intercalaciones durante 12 años.
6. Calendario Gregoriano
Para cerrar nuestra lista de los calendarios antiguos e importantes de la historia, no hay otra manera de hacerlo que presentando el calendario que actualmente se usa en todo occidente. Este calendario se denomina así por que su promotor fue el Papa Gregorio XIII y fue el calendario que vino a sustituir el calendario juliano.
Para este calendario se usan principios astronómicos como el cálculo metónico, que incorporó los años bisiestos al agregarle un día más al mes de febrero (si quieres saber por qué febrero tiene 28 días, da clic aquí).
Sabemos que no es necesario explicar el funcionamiento de este calendario porque en su mayoría lo usamos; no obstante, sí nos parece necesario explicarte de dónde sale. Verás todo nace a partir de llevar a la práctica uno de los acuerdos del Concilio de Trento. ¿Por qué? Bueno, había que definir el día para celebrar la Pascua, y con anteriores calendarios este día se iba moviendo como una festividad imprecisa. Con la reforma, el calendario gregoriano permitió que se diera una regularidad litúrgica. Con la introducción de este calendario también se comienza a celebrar el año a partir del 1 de enero. ¿Curioso, no te parece?
Esperamos que estos datos interesantes sobre los calendarios antiguos y representativos de la historia te hayan gustado. ¡Cuéntanos! ¿Cuál crees que debió ser el más efectivo? Por si no sabes mucho sobre los inicios del calendario o los datos curiosos de este, no dudes en visitar el año 1000 después de Cristo, te encantará. 😉