«¿Tienen que estar las mujeres desnudas para entrar en el Metropolitan Museum?», preguntaba en grandes letras negras el cartel con el que un grupo de activistas feministas, Guerrilla Girls, empapeló en 1989 las calles de toda Nueva York. Para esas épocas, en la historia del arte, las mujeres artistas estaban representadas tan solo en el 5% de la selección de artistas del museo, pero el 85% de los desnudos eran femeninos.
Aunque en la historia existen grandes mujeres artistas, como la memorable Frida Kahlo, la contribución de las mujeres en el arte es mucho más amplia y merece mayor reconocimiento. En Supercurioso hemos hecho un trabajo cuidadoso para darle rostro y nombre a todas aquellas mujeres importantes en la historia que han sido olvidadas y creemos que ha llegado el momento de nombrar a las mujeres artistas que, sabemos, han hecho historia.
Las mujeres artistas que han hecho historia
No es nuestra intención dejar información suelta, por eso para este especial de las mujeres artistas en la historia del arte, hemos decidido dividirlas por épocas, para que tengas un panorama más claro de su trabajo y pensamiento.
Mujeres artistas en el Renacimiento
1. Lavina Fontana (1552-1614)
Para dar comienzo a nuestro recorrido por las mujeres en la historia del arte, preferimos saltarnos a artistas como Sofonisba Aguissola y a Artemisia Gentileschi porque sabemos que ellas, poco a poco, han logrado salir del círculo de las mujeres artistas olvidadas. En cambio, te proponemos darle paso a una sucesora que tan solo académicos conocen: Lavina Fontana.
Se trata de una de las más grandes pintoras italianas que se encontró en la transición ente el Renacimiento y el Barroco. De hecho, fue una de las pintoras más importantes de su época e incluso dirigió su propio taller (actividad que, en ese entonces, solo estaba permitida para los hombres). Su increíble trabajo le permitió ser pintora oficial de la corte del papa Clemente VIII, un gran logro para esas épocas.
En la historia del arte, el caso de Lavina, a diferencia del resto de mujeres artistas, es bastante particular, pues ella se movió como cualquier pintor masculino en el medio; aceptaba encargos de particulares y vivía de sus ingresos como artista. En la actualidad, se estima que produjo más de 135 obras aunque solo se conservan firmadas y fechadas 32 pinturas.
2. Marietta Robusti Tintoretto (1560-1590)
Marietta fue el orgullo y la alegría de su papá, Jacob Comin mejor conocido como Tintoretto, el famoso pintor veneciano. No solo se trataba de una de las mujeres artistas de la historia sino también de una mujer hermosa, vivaz y joven.
Vestida en ropajes de hombre, Marietta acompañaría a su padre, especialmente viéndolo pintar y trabajando a su lado. Fue allí donde descubrió los secretos de su padre. Adoraba la pintura histórica pues eran piezas que exigían demasiado estudio y aplicación. Tan rica era su obra que tuvo más de tres ofrecimientos para trabajar en una corte. Sin embargo, nunca abandonó a su padre. Por esta misma razón, muchas de las obras que ella realizó, aún hoy, siguen siendo atribuidas a su progenitor.
Mujeres artistas en el Barroco
3. Anne Vallayer-Coster (1744-1818)
Pintora francesa conocida por su especialidad: la naturaleza muerta. Tras largos estudios en la Academia Real Francesa, fue en 1780 nombrada como la pintora oficial de la reina María Antonieta. Fue su especial habilidad para representar flores y bodegones que llegó a ser elegida por unanimidad miembro de la Real Academia de Arte de París. Ahora, muchos estudiosos de la historia del arte la consideran una de las mujeres artistas más notables de la historia, pues nunca dejó de pintar, ni siquiera cuando llegó la Revolución francesa.
4. Elisabeth Louise Vigée Le Brun (1755-1842)
También conocida como Madame Le Brun, es una de las más famosas retratistas jamás conocidas por la escuela francesa del siglo XVIII. Su estilo pictórico tiene influencias del rococó (muy apetecido por esa época), de ahí que haga parte de nuestra lista de mujeres artistas más importantes de la historia.
Le Brun se hizo un nombre en la ciudad parisina y disfrutó del patrocinio de aristócratas, actores, escritores europeos y de la mismísima María Antonieta, que como nos vamos dando cuenta, quería tener en su corte pintoras. Sus pinturas son ahora propiedad de museos como el Louvre, la Galería Nacional de Londres y el MET.
5. Marie Guillemine Benoist (1768-1826)
De todas las artistas del momento, Benoist resaltó por ser la primera pintora en temas de género. Sí, así como lo oyes, fue así que marcó un hito entre las mujeres y la histpria del arte. Aunque tuvo influencias de la escuela francesa, dejó todo atrás para retratar a las mujeres, desde Napoleona Elisa Baciocchi hasta la esclava de uno de sus cuñados.
Para tristeza de todos, su marido gracias al reconocimiento de la pintora fue nombrado miembro del Consejo de Estado y, por tal razón, ella se vio obligada a abandonar la pintura para cumplir con su labor de «dama de sociedad».
Mujeres artistas del siglo XIX
6. Rosa Bonheur (1822-1899)
Vivir en el siglo XIX tampoco fue fácil para las mujeres artistas de la historia. Sin embargo, se considera que Bonheur fue la primera mujer artista que obtuvo reconocimiento en sus propios términos y creando algunas de las pinturas más hermosas del mundo. Sin ser «bella» ni «encantadora», ni estar dotada de los talentos «femeninos» para el canto o el baile, fue juzgada al igual que sus colegas hombres; únicamente por la obra que producía. Muy independiente, pronto rompió muchas de las convenciones de su época, fumando cigarrillos, cuando ninguna «dama» debía hacerlo, o comprando tierras cuando pocas mujeres poseían propiedades.
A los 17 años, Bonheur ya estaba comprometida con el arte. Después de trabajar en paisajes, pinturas históricas y escenas de género, finalmente descubrió la dirección de su arte con su primer estudio sobre animales. Ella se hizo internacionalmente famosa con sus pinturas en gran formato.
7. Gwen John (1876-1938)
John tuvo una vida desenfrenada, ajena a las miradas masculinas y seducida por las femeninas. Esta artista, algo tímida, se dedicaba a pintar retratos de mujeres desconocidas, mujeres que eran imagen y reflejo de su vida.
Tras estudiar en la única escuela del Reino Unido que permitía mujeres, Gwen se vio opacada por su hermano Augustus John que también fue pintor. No obstante, a mediados de 1911, obtuvo un importante patrocinador que compró la mayoría de su obra, lo cual le permitió dejar de ser modelo para otros y dedicarse a su trabajo.
¡El número de dibujos de John es de miles! Además del trabajo de estudio, hizo muchos bocetos y acuarelas de mujeres y niños. A diferencia de sus escasas pinturas en óleo de mujeres solitarias, los dibujos muestran la cotidianidad de la vida de John. En resumen, se reconoce entre las mujeres artistas en la historia del arte por sus sutiles relaciones de color y temas cotidianos.
8. Gabrielle Münter (1877-1962)
Gabrielle Münter era hija de inmigrantes nacidos en Alemania que se conocieron y se casaron en Tennessee. Antes de su viaje a Estados Unidos, Gabrielle había tomado algunas clases de dibujo, «como hacían muchas chicas en aquella época» y había estudiado brevemente en la escuela de arte para mujeres de Düsseldorf.
Cuando se matriculó en la clase de Kandinsky en la escuela de La Falange, por fin la trataron en serio como una de las mujeres artistas más importantes de la historia. El grupo de La Falange, del que formaba parte la escuela, intentaba introducir a los impresionistas y postimpresionistas en Múnich y proporcionar un lugar para que expusieran los jóvenes artistas.
Kandinsky quedó impresionado por la facilidad con la que trabajaba Münter. «Todo te lo ha dado la naturaleza», le dijo a su alumna. Pero Kandinsky también se enamoró de ella. Durante la toma del poder por los nazis, sus cuadros fueron retirados de las paredes de los museos y condenados como degenerados.
Mujeres artistas del siglo XX
9. Meret Oppenheim (1913-1985)
La famosa «Taza de té de cuatro pasos» de Meret se ha convertido en una metáfora de la audiencia del artista moderno. Sin embargo, irónicamente, la mayoría de los estudiantes de arte asumían que su creador era un hombre, hasta hace poco.
Meret nació en Berlín de padre alemán y madre suiza. Cuando vio por primera vez las obras del surrealista Max Ernst, quedó impresionada e inspirada por su visión y el movimiento del surrealismo. Oppenheim siempre se sintió parte del «movimiento femenino muy ampliado» y por ello se negó a exponer en exposiciones que segregan sexualmente. Escribió con gran acierto sobre los problemas de ser mujer y la necesidad de un cambio de actitud por parte de hombres y mujeres.
10. Marisol Escobar (1930-2016)
Conocida simplemente como Marisol, con encanto, humor y un poco de ingenio devastador, Marisol se convirtió en la Daumier de los años 60. Combinando el dibujo, el modelado, el vaciado y los objetos encontrados y comprados para hacer una imagen monumental. Ella ridiculizó nuestros rituales, nuestros líderes y nuestras instituciones, creando algunas de las obras de arte más extrañas del mundo.
Su obra en los años sesenta la hace resaltar como una de las artistas mujeres de la historia, pues estaba llena de sátira social y política; aunque pronto se retiró de este ámbito. Marisol no es consciente de haber tenido dificultades en su carrera por ser mujer: «siempre supe que las tendría, fuera quien fuera, por la forma en que siempre he vivido al margen de la sociedad. Nunca esperé que la gente me tratara con amabilidad y sus costumbres contra las que me rebelaba», una de las frases de mujeres históricas que debemos recordar.
Esperamos que este rápido recorrido por algunas de las mujeres artistas más importantes de la historia te hayan inspirado a conocer más historias. Si quieres conocer más, te invitamos a descubrir algunos de los secretos escondidos en obras de arte, quedarás con la boca abierta, te lo aseguramos. Además, para que sigas inspirándote con el poder femenino, no puedes perderte nuestra entrada sobre el Museo Nacional de Mujeres Artistas.