Todos los eventos ocurridos en la historia de la humanidad, por más relevantes que sean, siempre estarán sometidos en importancia al de una única invención que simplemente lo cambió todo a su paso. Las conquistas de reinos lejanos, la civilización egipcia o la inca, la toma de posesión del territorio americano por parte del europeo… todo ello simplemente no existiría en la memoria colectiva si no hubiese ocurrido la invención de la escritura. Es en definitiva el primordial de los inventos del hombre, el que permitió que se construyese un legado para la posteridad. La historia de la escritura se remonta milenios atrás de nuestra existencia y hoy en Supercurioso queremos revelártela.
Gracias a estudios recientes y a la red de conocimientos de internet, es fácil saber que este logro extraordinario se produjo hace unos cinco mil años (a fines del siglo IV a.C.) en las mismas regiones donde no por casualidad surgieron también las primeras ciudades de la humanidad, la región de Mesopotamia, que hoy conocemos como Irak. Un milenio después, estos conocimientos se irían extendiendo, hasta que se desarrollasen escrituras en desarrollo en Egipto, la India y China. Veamos cuál fue el origen y evolución de la escritura. ¡Acompáñanos!
Las protoescrituras en la invención de la escritura
Antes de hablar de lleno de la invención de la escritura tal y como la conocemos, es necesario dar un paso atrás en el pasado. La realidad es que los sistemas de escritura no surgieron de golpe. La humanidad ya venía desarrollando símbolos y figuras con las que intentaba guardar y trasmitir información. Estos sistemas previos reciben el nombre de protoescrituras y se han encontrado muestras de ellos en cavernas, como la de Málaga (la Cueva de Nerja), con una antigüedad que oscila entre los diez y cuarenta mil años.
Otro ejemplo de protoescritura más conocido cuando hablamos de los antecedentes en la historia de la escritura, es el de las runas celtas, que convivieron con escrituras más evolucionadas, como el griego y el latín, y con las que hoy en día se continúa especulando en torno a sus significados. Hay más ejemplos de protoescrituras en China, donde recientemente se descubrió un caparazón de tortuga con muescas de seis mil años de antigüedad (y hay quienes opinan que se trata de la escritura más antigua del mundo). También los hay en Egipto, la India, Europa y América.
La historia de la escritura
1. La escritura en Mesopotamia
La invención de la escritura tan y como la conocemos se rastrea hasta hace unos cinco mil años atrás. Pero sus antecedentes son bastante más longevos, y respondieron a la necesidad del ser humano de comunicarse. Para el año 30000 a.C. los hombres hacían pinturas rupestres en las cuevas. Más avanzados en el tiempo, entre los años 5000 a 4000 a.C. aparecieron los primeros sellos cilíndricos, con los que se identificaba la mercancía grabando diversos signos sobre tabletas de arcilla blandas por rodamiento.
El punto clave en la historia de la escritura ocurre entre los años 3400 a 3200 a.C. De esa época datan las tablillas más antiguas encontradas en la ciudad de Uruk, que tenían interesantes inscripciones cuneiformes. Poco después aparecieron otras en Sumeria, al mismo tiempo que los primeros jeroglíficos egipcios. Para el año 3000 a.C. aparecieron en yacimientos de Susa y Uruk los primeros números que fueron considerados como tales. En definitiva, es a la civilización de estas tierras a las que se les atribuye la primera invención de la escritura.
2. La escritura en Egipto
Si bien todos los investigadores coinciden en que fue en Mesopotamia donde surgieron los primeros pasos en la invención de la escritura, son los egipcios los que se llevan los mayores honores. De hecho, se cree que este pueblo tomó la idea de aprender a escribir de los sumarios, en virtud de que hubo contacto entre ambas culturas. Sin embargo, a pesar de que la idea haya tenido el mismo origen, los símbolos empleados por los egipcios eran completamente distintos.
Las referencias de la historia de la escritura en sus orígenes mesopotámicos, relata que los sumerios acostumbraban a escribir en tabletas de arcilla o de barro. Por su parte, los egipcios solían grabar sus dibujos y signos en los monumentos. También los dibujaban en vasijas o en rollos de papiro, una especie de papel hecho con fibras de una planta que crece en orillas del Nilo.
Si te interesa profundizar en la enigmática cultura egipcia, no te pierdas este artículo en el que te contamos sobre los mejores documentales sobre la vida en el Antiguo Egipto.
3. La escritura en Arabia
Otra civilización de referencia en la invención de la escritura es la de Arabia. De hecho, en estas remotas tierras, existen referencias de la creación de un sistema propio de escritura. Aquello ocurrió alrededor del año 2500, y sus creadores fueron los elamitas, que hoy ocupan las tierras de Irán. De manera casi simultánea se desarrollan sistemas de escritura en el valle del río Indo, al Norte de La India, en lo que es hoy Pakistán.
4. La escritura en Asia
La historia de la escritura también encuentra puntos referenciales en Asia. De hecho, el pueblo chino también inventó su propio sistema de escritura, en la región del valle del río Amarillo.
5. La escritura en América
Perú es otra de las referencias en el estudio de la historia de la escritura. Antes de la llegada de los españoles había sistemas de escritura en Mesoamérica, en los pueblos mayas y aztecas. En Suramérica, a pesar de su gran desarrollo, los incas no tenían –o al menos no se ha descubierto hasta ahora– un sistema escrito que conservase los mitos y tradiciones quechuas. De hecho, lo que utilizaban era un sistema de nudos, los quipus, para llevar diferentes tipos de contabilidad, pero hasta ahora no se ha podido probar, del todo, que con los quipus pudiesen reproducirse palabras o ideas.
Quizás no pueda decirse lo mismo de los pueblos preincaicos.
Los petroglifos de Checta
A principios del año 2015, ocurrió otro gran hito que marcó el estudio de la invención de la escritura. Los investigadores de la Universidad de San Marcos (Perú), anunciaron la presencia de evidencias de una escritura preincaica en el sitio arqueológico de Checta, cien kilómetros al noreste de Lima. Son quinientos petroglifos o “quilcas” con una antigüedad de 4.500 a 5.000 años, que, de confirmarse como escritura, habría evolucionado al mismo tiempo que la sumeria.
El arqueólogo que encabeza este estudio, Gori Tumi Echevarría, señaló: “este fenómeno cognitivo duró dos mil años, tiempo suficiente para el desarrollo y consolidación de un sistema de escritura ideográfica compleja”. La cultura que produjo estos códigos desapareció mil años antes de nuestra era y hasta ahora no se ha podido descifrar su contenido.
Los números en la invención de la escritura
Especial mención en este recorrido por la invención de la escritura merece el origen de los números. Recordemos que los primeros conocidos fueron los de los yacimientos de Susa y Uruk, de hace unos cinco mil años. Pero lo que es seguro es que los hombres empezaron mucho antes a contar. De hecho, lo hacían apilando piedras o haciendo marcas en las paredes. Al principio, los números solo servían para contar y se iban añadiendo signos hasta el diez, en que se hace un signo diferente.
Especial relevancia en la historia de la escritura tuvo la invención del número cero. Muchos investigadores creen que fue obra de los chinos, pero su uso consta por primera vez en la India, donde lo aprendieron los árabes. Este sistema de numeración, conocido como arábigo, se extendió por todo el islam, y años después llegó hasta territorios europeos.
Y tú, ¿Conocías el recorrido vital en la invención de la escritura? ¿Sabías, por ejemplo, que aunque tan desarrollados en diferentes aspectos, los Incas no llegaron nunca a escribir? ¿O quizás que fue China el origen de los números modernos? Desde hace miles y miles de años que el hombre evolucionó hasta la creación de estos códigos de comunicación no verbal, a través de los cuales la historia pudo sobrevivir a las vidas finitas, heredándose de generación en generación.
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