¿Sabes qué es una fobia? Cuando algo nos paraliza del miedo y no podemos reaccionar, lo llamamos fobia, pues es un miedo irracional frente a un estímulo que interpretamos como amenazante, aunque realmente no lo sea. Normalmente, decimos que una fobia surge a partir de una situación traumática, pero algunas de las fobias más raras del mundo no tienen una explicación concreta. Tal es el caso de la turofobia (miedo al queso) y, por supuesto, de la tripofobia. Acompáñanos en Supercurioso a descubrir qué es la tripofobia y algunos datos sobre esta enfermedad.
¿Qué es la tripofobia y qué la causa?
Antes de comenzar, es importante no confundir la tripofobia con la dermatofobia (el miedo a las enfermedades de la piel) la aclaración es importante porque en internet suelen circular imágenes que son falsas y que incitan a tener impulsos de repulsión que inmediatamente pensamos son tripofobia, pero no es así. Aquí te contaremos todo sobre la tripofobia, sus causas y sus mitos.
La tripofobia viene del griego trypo que significa perforación o agujero y fobia que es el padecimiento de un miedo irracional. Es el miedo a la sucesión de agujeros o huecos en serie y próximos entre sí, especialmente agujeros redondeados pequeños o rectángulos pequeños. La investigación al respecto es limitada, no obstante, se sabe que al sufrir esta fobia, el cuerpo inicia a producir cosquilleos, comezón o picazón, ansiedad, incluso náuseas.
Al igual que otras fobias más comunes, el miedo a los agujeros provoca niveles de gravedad que no permiten llevar una vida «normal». Desde casos en los que la fobia se manifiesta en ocasiones muy particulares, hasta otros en los que una sencilla naranja o un queso Gruyere pueden producir episodios de gran agobio y angustia.
Como consecuencia, esta fobia podría asociarse a un factor evolutivo, pues según el investigador Geoff Cole, es posible ver la relación de esta patología con algunos de los animales más letales del mundo, pues en sus pieles presentan patrones orgánicos similares.
De acuerdo con esto, la tripofobia antes era tomada como un mecanismo de supervivencia que se utilizaba hace cientos de años. La gran mayoría de animales peligrosos, como los pulpos o las ranas punta de flecha, tienen en su piel patrones muy similares a los que manifiesta la fobia. Podríamos pensar que ¡es un instinto que aún no se ha perdido!
1. ¿La tripofobia es una enfermedad?
De acuerdo con algunos expertos, entender qué es la tripofobia es también reconocer que esta es una enfermedad real, y que muchas personas al rededor del mundo la padecen. Como toda patología, se caracteriza por tener una serie de síntomas (algunos de los cuales mencionamos anteriormente) y otros como falta de aire, mareo, asco y repulsión e incluso síntomas de presión alta.
Pero uno de los síntomas más característicos de esta fobia es la excesiva impotencia que siente la persona al no poder controlar sus emociones. Asimismo, la intensidad en la fobia varía dependiendo de la persona; hay quienes le temen únicamente a orificios grandes y en cantidad, como otros que no resisten ni siquiera ver la piel de una naranja.
2. ¿Cómo saber si le tienes miedo a los agujeros?
¡Es muy sencillo! De hecho, si padecieras de miedo a los agujeros, sabrías inmediatamente que posees esta fobia, no podrías soportar ver ninguna de las imágenes que hemos puesto aquí.
A diario nos cruzamos con centenares de patrones geométricos y orgánicos que también influirían en tu cotidianidad si padecieras tripofobia. Sin embargo, si sientes algún síntoma, deberías consultar con un especialista para tener un diagnóstico adecuado.
Aunque la Asociación Americana de Psiquiatría no contempla la tripofobia dentro de su Manual para el diagnóstico de Trastornos Mentales, según cifras, existen alrededor de 12 millones de personas que dicen sentir ansiedad o temor al ver patrones orgánicos en secuencia.
3. ¿Se produce en la piel?
En la web seguramente hemos encontrado imágenes donde muestran partes del cuerpo humano, especialmente partes sensibles, infectadas con una extraña enfermedad. Las imágenes señalan una serie de agujeros que forman una trama y parece asomarse un objeto, un gusano, quizás, al exterior. ¡Probablemente, pensamos que es tripofobia!
¡Estas imágenes son montajes! De forma más burda o más creíble, se superpone a la imagen de la piel sana siempre al mismo patrón, que no es ninguna enfermedad, sino la trama de la flor de Loto seca, y los «gusanos», sus semillas. «Patología larvática lepidóptera» significa literalmente «enfermedad de las larvas de mariposa», y tal enfermedad, como es evidente, no existe. Sabemos que a muchos al ver estas imágenes nos ha dado una sensación de repulsión, pero esperamos que eso ¡no suceda nunca más!
¿Sufrimos de la fobia si nos desagradan estos montajes? No necesariamente. Es indudable que los montajes fueron realizados precisamente con la intención de hacerte creer que padeces esta fobia. Los pies, pezones, ojos, y la cara en general, son partes especialmente sensibles de nuestro cuerpo, y el desagrado es una reacción bastante normal de nuestro cerebro ante enfermedades aparentemente graves.
4. ¿Tiene tratamiento?
Existen varios tratamientos para poder superar una fobia, la más utilizada es la terapia cognitivo-conductual, el objetivo de esta es ignorar las experiencias negativas.
A su vez, la terapia de choque es un medio eficaz y comprobado que permite una aproximación paulatina del paciente hacia la fobia mediante estímulos estresantes. Esto supondría empezar por imágenes y luego pasar a situaciones generadoras de ansiedad que podría culminar en la confrontación directa de la fobia.
Todas estas terapias y tratamientos son utilizados en general para tratar todo tipo de fobias. Existen algunas con mayor prioridad y, por tanto, tratamientos específicos, pues tienen una mayor afectación en la población. Sin embargo, para la tripofobia no existe ningún tipo de tratamiento que se enfoque únicamente en ella.
Por otro lado, encontramos el posible tratamiento y control a través de medicamentos.
- Los tranquilizantes, por ejemplo, ayudan a dominar la ansiedad que esta fobia puede producir.
- Los antidepresivos son también una buena herramienta de control, ya que actúan como inhibidores de la serotonina.
Estos medicamentos siempre deben ir indicados por un experto.
Otras fobias increíbles, además de la Tripofobia
Además de la Tripofobia, existen otras fobias que resultan igualmente sorprendentes… ¡E incluso más! ¿Te animas a descubrirlas?
- Qué es la turofobia, miedo al queso
- Qué es la Eisoptrofobia, miedo a los espejos
- Qué es la aracnofobia, miedo a las arañas
- Qué es la glosofobia, miedo a hablar en público
- Qué es la acrofobia, miedo a las alturas
- Qué es la hafefobia, miedo a que te toquen
- Qué es la decidofobia, miedo a tomar decisiones
- Qué es la tanotofobia, miedo a la muerte
- Qué es la aerofobia, miedo a volar en avión
- Qué es la ofidiofobia, miedo a las serpientes
- Qué es la hemofobia, miedo a la sangre
- Qué es la clautrofobia, miedo a los espacios cerrados
Por último, seguro que te interesará conocer estas curiosísimas fobias de famosos: Johnny Depp, Sigmund Freud, Pamela Anderson, Alfred Hitchcock y muchos más.
Sin duda alguna, el miedo a los agujeros es una fobia que debe ser identificada y reconocida, por la afectación psicológica de aquellos que la padecen. ¿Qué es lo más extraño de la tripofobia? ¿Sufres alguna fobia? Cuéntanos ¡Te leemos!